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RUSIA
Declarando la victoria en Siria, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, visitó el lunes una base aérea de su ejército en el país y anunció la retirada parcial de las fuerzas de Moscú del país del Medio Oriente.
Esta fue la primera vez que Putin visita Siria, resaltando de forma simbólica una campaña que apuntaló el gobierno de presidente Bashar al Asad. Fue además la primera vez que un jefe de Estado extranjero visita la nación desde el inicio de la devastadora guerra hace casi siete años.
La breve escala de Putin en la base aérea de Hemeimeem, en la provincia costera de Latakia, durante su viaje a Egipto, se produjo apenas unos días después del anuncio de que optará a la reelección en los comicios del 18 de marzo, ayudando a fomentar el sentimiento de orgullo por el recuperada influencia y prestigio de la nación en el escenario internacional.
Llega también después de que Moscú anunció la semana pasada que el ejército de Damasco, con la cobertura de la aviación rusa, derrotó al grupo extremista Estado Islámico en el este de Siria y recuperó el control total de la frontera con Iraq.
