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El presidente del Poder Judicial asegura que “si todos los poderes del Estado entran en crisis, esto va a ser aprovechado por sectores
El presidente del Poder Judicial, Duberlí Rodríguez, explicó que los cambios en el Poder Judicial se deben a que existían dos instituciones anticorrupción en paralelo: la Sala Penal Nacional y el Sistema Nacional de Corrupción de Funcionarios; y negó que los cambios se hayan hecho para ir en contra del juez Concepción Carhuancho.
En una entrevista para el diario El Comercio, Rodríguez aclaró que el estatuto era absolutamente necesario porque todos esos jueces son de distintas cortes del país, que fueron invitados y pretenden que el prestigio de Concepción Carhuancho los mantenga dónde están. Por ello, aseguró que solo serán titulares cuando ganen un concurso.
El titular del Judicial hizo un llamado a la sala penal para que dejen de lado esa actitud de rebeldía y confrontación.
“Si no, sería la anarquía absoluta. (…) No solo están en crisis los otros poderes, sino el Judicial, ¡no puede ser! Espero que vuelvan al orden. No puede haber rebelión en un poder del Estado”, expresó.
Rodríguez refirió que respeta la decisión de los fiscales y jueces, sobre el allanamiento de los locales de Fuerza Popular. Sin embargo, aceptó que el hecho pudo ser “hipotéticamente incorrecta”. Asimismo, indicó que la denuncia constitucional del Congreso contra el fiscal Pablo Sánchez “puede interpretarse como interferencia a la labor de órganos jurisdiccionales”.
Ante ello, Duberlí Rodríguez instó a todos los poderes del Estado para que las cosas vuelvan a su nivel. “Si todos los poderes del Estado entran en crisis, esto va a ser aprovechado por sectores violentistas”, dijo en la entrevista.
