Quieren meter miedo

No va más el proyecto minero Michiquillay, que forma parte de las inversiones que PPK sustenta “el crecimiento económico de su gobierno”. La minera peruano-brasileña Milpo dijo que su decisión obedece a que “no está de acuerdo” con las propuestas de modificación de parte de Pro Inversión “ya que no se ajustan a las condiciones del mercado”. Según comentan por allí, la postura de Milpo no sería más que parte de la estrategia de presión que buscan realizar las empresas mineras para obtener mayores beneficios, aprovechando la coyuntura política y económica que atravesamos. No nos sorprendamos que en los próximos días otros proyectos “emblemáticos” de este gobierno tomen el mismo camino. ¡No más regalos!.